A la luz de los últimos años, los comportamientos
de las 5 súper potencias militares del mundo (EE.UU, Rusia, China, Francia y
Reino Unido) cada vez que se pone en riesgo sus intereses internacionales
geopolíticos y económicos; y los de
algunos regímenes de facto en varios continentes, justifica la impostergable
necesidad política de promover y abrir un debate en lo nacional como en lo
internacional sobre la aplicabilidad objetiva y humana de este principio, el
derecho libre de los pueblos de decidir sus propios destinos libremente sin injerencias externas, de la mano de otro
fundamento como lo es el de la igualdad. Éste está recogido en la Carta de las
Naciones Unidas en muchas de sus resoluciones, entre otras, las 1514 (XV), 1541 (XV) o 2625 (XXV), un
principio fundamental del Derecho internacional público. Coinciden en lo
siguiente:
1. La sujeción de pueblos a una subyugación,
dominación y explotación extranjeras constituye una denegación de los derechos
humanos fundamentales, es contraria a la Carta de las Naciones Unidas y
compromete la causa de la paz y de la cooperación mundial.
2. Todos los pueblos tienen el derecho
de libre determinación; en virtud de este derecho, determinan libremente su
condición política y persiguen libremente su desarrollo económico, social y
cultural.
3. En los territorios en fideicomiso y no
autónomos (caso de las Malvinas) y en todos los demás
territorios que no han logrado aún su independencia deberán tomarse inmediatamente
medidas para traspasar todos los poderes a los pueblos de esos territorios, sin
condiciones ni reservas, en conformidad con su voluntad y sus deseos
libremente expresados, y sin distinción de raza, credo, ni color, para
permitirles gozar de una libertad y una independencia absolutas.
Hay
otras realidades que ya desbordan y ponen entredicho el espíritu de justicia y
de humanidad de la “Autodeterminación de los pueblos”; uno de ello, es que a
ciencia cierta en repúblicas sometidas y gobernadas bajo regímenes autoritarios
éste fundamento no aplica, por una razón muy sencilla, no está expresada la
voluntad de su gente, de sus nacionales; porque sus gobernantes llegaron al
poder por la vía de la fuerza, de la violencia. En ese sentido llegó la hora
para exigir a la comunidad internacional más democracia como condición de
justicia humana y de equidad social. La OEA lo tuvo muy claro cuando en su
Carta Democrática interamericana aprobada el 11 de septiembre de 2001 estableció
como requisito -sine qua non- para ser miembro la preeminencia de la democracia
como sistema de vida política. Esta ha
sido hasta ahora la razón por la cual Cuba no forma parte de este ente supra regional.
La otra
realidad, muy reciente, y que ya está afectando y desvirtuando el sentido de
protección de las libertades de los habitantes de una nación, sus derechos de
exigir se cumplan las normas constitucionales, es la del divorcio existente
entre la legitimidad de origen de un gobierno en democracia y su legitimidad en
el ejercicio, donde se conspira desde el poder, incluso, contra la
institucionalidad de los pilares fundamentales de una democracia como son sus
libertades, igualdad, diversidad de pensamientos y de acciones, el
reconocimiento de la oposición, sus dirigentes y toldas partidistas, y
cualquier organización no gubernamental. Se suma las violaciones reiteradas
de las normas constitucionales y el
secuestro de la autonomía e independencia de los poderes públicos; la balanza,
el contra peso de garantía del equilibrio y de la justicia en una sociedad
democrática funcional. Un ejemplo de esa distorsión, caso de Venezuela, donde
hubo un referendo para aprobar o desaprobar el proyecto socialista comunista
del anterior presidente, y las mayorías
votaron en su contra; sin embargo, se ha
venido implantando a través de leyes de manera inconstitucional, bajo la
complicidad de unos poderes públicos sumisos, intervenidos y controlados por el
Ejecutivo. Lo más grave, la injerencia en la vida militar, política, económica
y social de nuestros destinos de un gobierno extranjero de corte comunista como
el de Cuba
Presidente
del Ifedec, Capítulo Bolívar
@renenunezr
“Problemas
y Soluciones”, los sábados, 1 a 3 pm, Unión Radio 8.81 FM
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