Suele decirse en el argot popular
que quienes hablan en primera persona, pecan de inmodesto. Hoy corro ese riesgo de
que me etiqueten o incluyan en ese grupo de presumidos por tratar un tema que
me apasiona y no he dejado como columnista por más de 30 años de tratarlo, me
refiero al del progreso y desarrollo humano.
En más de 50 años de democracia, a
los venezolanos ese proceso nos ha sido esquivo sin justificación alguna; a
pesar de que hemos contado siempre con inmensas y variadas riquezas naturales,
geográficas y ambientales favorables. De haberlo construido, hoy deberíamos estar
disfrutando de una merecida y justa calidad de vida integral los 30 millones de
ciudadanos. Otros pueblos en el mundo la lograron con imaginación creadora, la
que desgraciadamente han carecido quienes han dirigido los destinos nacionales
en los últimos tiempos. Estos diez últimos años, los peores y sin precedente en
los anales de la historia republicana.
No cabe duda, la supremacía de una
cultura inmediatista, de “borrón y cuenta nueva”, sin continuidad
administrativa, dependiente de la factura petrolera, ha conspirado contra
cualquier intención de planeamiento a largo plazo del desarrollo de la nación. Para
colmo, hemos tenido la mala suerte de una clase de dirigentes influyentes, más preocupados
por alcanzar el poder para servirse asimismo
que la de servir a los ciudadanos, a quienes se deben
constitucionalmente.
Cuando bajamos este tema del
progreso y desarrollo a las regiones, encontramos potenciadas todas estas
distorsionadas formas de hacer política y gobierno. Por ello hoy, y en varias
entregas sucesivas, estaré compartiendo algunas Líneas Maestras básicas para la
formulación de un plan de desarrollo del Estado Bolívar, incluyente, viable en
lo económico, con equidad social y que considere el medio ambiente. Todo con el
propósito de ponerlas en la mesa de discusión de los aspirantes a gobernar al
Estado Bolívar el próximo año; por lo que me han dicho ya van como quince. ¡Qué
horror!
La propuesta de ideas la inicio,
identificando aquellos factores que de acuerdo a nuestro criterio, han sido,
entre otros, causantes agravantes de la extrema situación económica y social
que padecemos hoy la sociedad bolivarense.
DIAGNÓSTICO:
1. Improductividad. 2.
Ideologización. 3. Estatización. 4. Expropiación. 5. Inseguridad natural y jurídica (Impunidad). 6.
Deficiencia en prestación de los servicios públicos. 7. Desidia en materias
ambiental y de salud. 8. Corrupción. 9. Actitud reactiva en elecciones, después
de ellas no son proactivos. 10. Incumplimiento, irrespeto y búsqueda de
culpables. 11. Resistencia a los cambios y al diálogo. 12. Alta deserción
escolar. 13. Poca cultura de planificación estratégica, ejecución, evaluación y
control. Poca motivación al logro colectivo. 14. Equipos de trabajo no preparados
y capacitados para gobernar, no tienen conciencia de visión de desarrollo. 15.
No valoran ni consideran las estadísticas
para la toma de decisiones. 16. No son innovadores. 17. Escasa cultura general.
18. Conflictividad de poderes (regional vs municipios)
MISIÓN:
Inicio, sin dilación, de un diálogo
social entre : organismos empresariales y comerciales, gremios profesionales y
técnicos, organizaciones sindicales, universidades, dirigentes estudiantiles, partidos
políticos, ONG, gobiernos: regional y municipales, diputados, iglesias,
consejos comunales, entre otros, con la finalidad de oírse y entenderse en la
ineludible e impostergable necesidad de establecer un consenso social por la
prosperidad regional, donde todos se sientan comprometidos con un plan de
desarrollo que procure mejorar la
calidad de vida de los bolivarenses y de las instituciones estadales que nos
merecemos como ciudadanos y seres humanos. (Continúa)
Presidente
del Ifedec, Capítulo Bolívar @renenunez51
Los
domingos, 8 a 9 am, en Onda Global por Onda 97.3 FM
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